Considere la madurez de su hijo, las reglas de uso, la etiqueta y la seguridad en línea, y elija un proveedor.
Si su hijo se acerca a los dos años, probablemente lo hayan estado molestando por un teléfono. En muchos casos, esto tiene un buen sentido logístico. Si empiezan a tomar el transporte público por su cuenta o ir a actividades extraescolares, por ejemplo, querrás poder llegar hasta ellos y viceversa. Dicho esto, darle un teléfono a su hijo conlleva una serie de consideraciones importantes, como la seguridad y la responsabilidad. Estas son las cosas que debe considerar al comprar el primer teléfono de su hijo.
Primero, ¿su hijo es lo suficientemente maduro para tener un teléfono?
La edad no es el determinante más importante de la madurez. Un niño de 15 años puede perder cosas perpetuamente, mientras que un niño de 11 años cuida mucho sus pertenencias. Pregúntese si su hijo tiene un buen sentido de la responsabilidad: ¿aparece cuando dice que lo hará? ¿Completan tareas sin recordatorios? ¿Entienden cuánto cuestan las cosas? De lo contrario, es posible que aún no sean propietarios confiables de teléfonos.
Establecer reglas
Establezca reglas desde el principio y establezca las consecuencias si se rompen. Por ejemplo, establezca límites en el tiempo dedicado al teléfono. Especifique las horas del día en las que no se permite el uso del teléfono, como por la noche, durante la tarea o durante las actividades familiares. Además, ¿para qué se les permite usar el teléfono? ¿Enviar mensajes de texto y llamar? ¿Qué aplicaciones sociales están permitidas, si las hay?
Acuerde la cantidad de dinero disponible para cubrir el plan de datos, si se permiten gastos de juegos o aplicaciones y cuánto contribuirá el niño. Además, si el teléfono se pierde o se rompe, ¿será reemplazado? Si es así, ¿quién paga?
Una de las formas más efectivas de asegurarse de que estas reglas sean claras para ambas partes es crear un contrato que detalle estas reglas para que usted y su hijo lo firmen, enfatizando que un teléfono es un privilegio, no un derecho.
Practique la buena etiqueta telefónica y la seguridad
Si no quiere que sus hijos envíen mensajes de texto en la mesa, revisen Instagram durante una conversación o hablen en voz alta en sus teléfonos en público, tampoco debería hacer esas cosas.
Hable sobre la etiqueta digital, lo que incluye no intimidar o avergonzar a otros en línea o enviar imágenes o mensajes inapropiados. Estos detalles también se pueden incluir en el contrato.
Pero no confíe en el contrato como suficiente. Tenga conversaciones continuas sobre cómo los textos y las actividades en línea se pueden compartir públicamente. También hable sobre la seguridad en línea para no compartir información personal o relacionarse con personas que no conocen. Su hijo debe saber que es su responsabilidad revisar su teléfono para ver qué están haciendo en línea para garantizar su seguridad.
Elija el teléfono correcto y el proveedor correcto
Decidir qué tipo de teléfono o contrato obtener significa tener una comprensión clara de cómo lo usará su hijo. Se trata principalmente de mantenerse en contacto, pero los teléfonos inteligentes ofrecen otros beneficios, como encontrar tareas, transmitir programas favoritos, tomar fotos y videos, jugar juegos y rastrear a sus amigos.
Vea qué teléfono y plan es mejor para su familia. Tal vez obtengan un teléfono más fácil de iniciar o su teléfono anterior mientras obtiene una actualización. Por ejemplo, Rogers está ofreciendo ofertas de regreso a clases en los últimos dispositivos 5G como el iPhone 13 y el iPhone 13 Pro con $0 de pago inicial y 0% de interés*. Independientemente de lo que decida, asegúrese de que sus hijos entiendan que los buenos teléfonos conllevan una gran responsabilidad. Visitar rogers.com para más información.